Los bloqueos de calles y avenidas en Xalapa

Opinión    Gustavo Filobello Niño

Esta es la realidad vial en Xalapa.
Ayer miércoles, una señora enferma que necesitaba urgentemente una cita con su médico especialista en el Hospital Civil de Xalapa no llegó a tiempo y se la cancelaron. Ahora tendrá que volver a agendarla y esperar, al menos, un mes.
También una mamá desesperada por recoger a su hijo de la escuela primaria, ubicada cerca del Parque de Los Berros, sabe que llegará tarde. Angustiada, intenta contactar a otra madre del salón para que la apoye y recoja al niño.
El camión urbano en el que un joven mesero viaja hacia su trabajo en el restaurante de carnes fue desviado de su ruta. En medio de un caos vehicular, el chofer intenta avanzar por donde pueda, pero el mesero sabe que llegará tarde a la chamba y ruega a los santos para que su jefe se apiade y no le descuenten el día.
La ambulancia que viene desde Naolinco, trasladando a un enfermo grave hacia la Clínica 11 del IMSS en Las Lomas del Estadio, no pudo cruzar el centro de la ciudad para tomar el viaducto del Parque Juárez y acelerar su llegada al nosocomio.
Y así como estas historias reales, miles más de xalapeños o visitantes que de un momento a otro ya no pueden cruzar el centro de Xalapa porque alguna organización «tomó» la calle de Enríquez, impidiendo el paso de automóviles como una forma de presionar a las autoridades.
Sin dejar de reconocer el derecho que tenemos a manifestarnos libremente y a exigir solución a nuestros problemas, individuales o colectivos, opino que hay una línea muy delgada para identificar dónde inicia tu derecho y dónde el mío.

La mayoría de quienes se manifiestan lo hacen porque no encuentran solución a sus demandas, y porque las autoridades responsables de responderles no pueden o no quieren atenderlos. Ahí la culpa es 100% de los burócratas incapaces.
Pero si la manifestación y el cierre de la vialidad son más por presión política o «grilla», y que son la mayoría de ellas, entonces la situación es al revés: por sus muy particulares intereses, los perjudicados somos los capitalinos. No se vale.
¿O qué les dirán estos «grillos de cuarta», que por exigir audiencias para sacar ventajas políticas y dinero, bloquearon la calle y la ambulancia de Teocelo, la mamá del niño, la mujer enferma o all mesero no pudieron llegar a sus citas o trabajos? ¿Acaso piensan en el terrible daño que hacen a los xalapeños? Para nada. No les importa.
Si usted ha padecido estos bloqueos, sabe de lo que estoy comentando.
Y la bomba es más fuerte si se junta un manifestante insensible y politiquero con un servidor público negligente e incapaz. Y vaya que si los hay.
¿O usted qué opina?