El “Cartel de los Cuicas” operó el millonario desvío de los estadios “Pirata” y “Nido del Halcón”

LíneaCaliente  Edgar Hernández*
 
 
Sigue saliendo pus.
A partir de la negativa de la gobernadora Rocío Nahle de seguir echando dinero bueno al malo en aras de ver concluidos e inaugurados los emblemáticos estadios “Pirata” Fuente y el “Nido del Halcón”, se destapó la cloaca que salpica a las familias de Cuitláhuac García y Zenyazen Escobar.
Atrás del denominado “Cartel de los Cuicas”, que va de la mano del “Cartel de las Grúas”, se movieron operaciones fraudulentas superiores a los 5 mil millones de pesos.
Ayer en este espacio reseñábamos la escalada de corruptelas y millonarios desvíos en la construcción de los estadios arriba citados en cuya remodelación y construcción se dispusieron partidas que alcanzaron los 2 mil 968 millones pesos.
Ello dio lugar a que se pusieran al descubierto cabezas visibles, todas en torno a la familia que se autodenominó el “Cartel de los Cuicas”.
Resulta que el ingeniero que estuvo a cargo el “Pirata” Fuente fue Ricardo García Jiménez, exdirector de “Espacios Educativos” de la Secretaría de Educación de Veracruz. El sujeto de marras es primo hermano de Zenyazen Escobar, ex Secretario de Educación de la SEV, hoy diputado federal, quien durante su gestión le cedió la Oficialía Mayor a Eleazar Guerrero, primo hermano del gobernador, quien a su vez se la entregó a su “amiga” Ariadna Celeste Aguilar.
Todo quedó en familia.
Pero regresando al tema, del presupuesto original de 400 millones destinado al estadio de ¨Pirata” Fuente de Veracruz, se disparó más de tres veces -hasta mil 600 millones- y quedó en las condiciones que ayer reseñábamos, un desastre.
El cuento no acaba ahí. Toma forma al revelarse el papel que jugó el ingeniero Ricardo García Jiménez cuando estuvo al frente de “Espacios Educativos», que de siempre fue la “Caja Chica” de la SEV.
Hace algunas semanas fue observada la institución por la Auditoría Superior de la Federación por el desvío de recursos públicos que alcanzan los 32 millones de pesos.
De acuerdo con el informe de la auditoría, dichos contratos presentaron incumplimientos en la amortización de anticipos, falta de documentación comprobatoria de avances de obra y retrasos en plazos pactados. Además, se observaron deficiencias en la calidad y funcionalidad de algunas obras y pagos por conceptos no ejecutados.
En una primera revisión, la ASF detectó que 14 obras públicas no fueron registradas ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), lo que podría haber derivado en la omisión del pago de cuotas de seguridad social para trabajadores de la construcción. No obstante, el Gobierno de Veracruz presentó documentación con la que acreditó el registro de 12 de estas obras, así como la suspensión de otra y la justificación legal de una más, lo cual permitió solventar esta observación.
La auditoría señaló que 13 contratos presentaron irregularidades -IEEV-FAMB-2024-106, IEEV-FAMS-2024-136, IEEV-FAMB-2024-138, IEEV-FAMB-2024-139, IEEV-FAMB-2024-169, IEEV-FAMB-2024-187, IEEV-FAMS-2024-191, entre otros.
Y para el caso de la Oficialía Mayor de la SEV, este sí nido de la corrupción, se detectaron cuantiosos desvíos millonarios que dio lugar a que Zenyazen Escobar y su exoficial mayor, la exuberante Ariadna Celeste Aguilar Amaya se culparan mutuamente de autorizar 200 contratos a empresas de reciente creación -las conocidas como “Fantasma”-.
A fiesta con ese grupo, que incluyen las “Tiendas Escolares” que les dio un beneficio de nada más cinco mil millones de pesos.
Queda en el tintero la concesión del “Nido del Halcón” entregado a la familia Fernández Chedraui que cobraron y abandonaron la obra a medio construir. De ello nos ocuparemos en la siguiente entrega que dan cuenta de las grandes ligas en las se movió el “Cartel de los Cuicas”.
Tiempo al tiempo.
 
*Premio Nacional de Periodismo