El famoso “boquete financiero” que tenía Veracruz, está superado

Política al día Express  Atticuss y Francisco Licona

A partir del sexenio anterior, año con año éste se fue reduciendo, y de los 4,500 millones de pesos que se tuvieron que pedir el primer año como financiamiento de corto plazo para poder pagar sueldos en diciembre, poco a poco fueron disminuyendo y a finales del 2024, ya no fue necesario solicitar más financiamientos.

Las medidas de austeridad y la disciplina financiera, llegaron para quedarse en Veracruz, y en el presente gobierno de Rocío Nahle García, así lo han entendido y han continuado con la mística que pone las finanzas sanas: no más financiamientos de corto plazo, control del gasto, aumento y sostenibilidades de recursos de libre disposición, mejor recaudación, entre otras.

Precisamente gracias a esas medidas es que la agencia HR Ratings modificó al alza la calificación de Veracruz, al pasarla de “HR A-” a “HR A” y modificó la perspectiva de “positiva” a “estable”. Lo anterior fue resultado de la disciplina financiera que mantiene la entidad reflejo de la aplicación transparente de recursos públicos.

Aquellos viejos tiempos en los que no había para pagar a proveedores, en los que se llegaba a diciembre sin un centavo en caja y era necesario recurrir a deudas para pagar la nómina, en que se gastaba con discrecionalidad, han sido superados en Veracruz y se espera que no vuelvan.

Ahora es momento de ver para adelante, y este fin de año se debe observar no solo que ya no será necesario pedir financiamientos, sino incluso, mayor obra pública o inyección a capital para disminuir la deuda a largo plazo o la bancaria.

Las reestructuraciones financieras pueden continuar, pues con un Estado con una calificación “estable”, se pueden conseguir mejores tasas y descuentos en los pagos y las amortizaciones.

Quedará tal vez por mucho tiempo el fantasma que políticos de oposición quisieron sembrar en el sentido de que se aumentó la deuda en el sexenio pasado, derivado en sí porque nunca quisieron reconocer que la deuda no solo es la bancaria sino también las otras contingentes que el Estado debió cubrir y que superaron los 20 mil millones de pesos.

¿Cómo se puede seguir mejorando la calificación del Estado? Los expertos señalan que esa calificación se podría ver impactada positivamente si se realizan pagos adicionales o se depura el pasivo contingente.

Por lo pronto, esta nueva calificación son buenas noticias y un reconocimiento a lo bien que ha mantenido las finanzas el gobierno de Rocío Nahle.

Columnas de opinión

Columna hoy

UV: Autoritarismo que ignora y aplasta a la comunidad universitaria


En Esta Hora   Luis Bustos

 

 

 

 

 

Lastimosa, muy lastimosa, la decisión de la Junta de Gobierno de la Universidad Veracruzana al dar luz verde a la prórroga del Rector. Triste, e inclusive hiriente, ha resultado prolongar la administración del representante UV más alejado de la UV.

¿Lo primero que viene como interrogación es quién propuso a esas personas como miembros de la Junta de gobierno? ¿Quién les reconoce apego y arraigo UV?

Por su resolutivo, dan muestras de estar muy lejanos de la comunidad universitaria. Porque lo más visto en los últimos días nos habla de que el rector es la persona más repudiada dentro de la comunidad UV; que no se le reconoce acercamiento con la base estudiantil, ni con la plantilla de catedráticos y aún así, la dichosa junta, bueno los consejeros que quedan, (porque dos, por dignidad, renunciaron) lo ratificó en el cargo (la prórroga es eso, ratificación).

Está tan sucio el proceso que la propia gobernadora del estado, ingeniera Rocío Nahle, dio su opinión cuando fue cuestionada al respecto y, en su respuesta, deja claro su respeto a la autonomía universitaria y afirma que esa es responsabilidad exclusiva de la Junta: “Yo aquí lo dije y aquí leí, que la Junta de Gobierno es la que tiene la autoridad y la organización para el proceso en la rectoría y ahorita en la mañana efectivamente le autorizaron la prórroga al actual rector para que se quede (…) hasta el 29, está bien, allá ellos”. Es una autonomía, la universidad es autónoma, dejaría de ser autónoma si yo me meto, entonces ahí que resuelva, así resolvió la Junta de Gobierno, bueno, yo respeto, es la junta de gobierno”, concluyó.

De esta manera, queda claro que tanto la comunidad universitaria como el poder ejecutivo están fuera del ámbito de la Junta, la que, con intereses no conocidos y quizás inconfesables, votaron a favor de la prórroga.

Como egresado de la UV me sumo al conglomerado que se siente agraviado con esta pésima decisión.

A día de hoy se extraña la presencia de aquellos dirigentes estudiantiles que sí se involucraban en la búsqueda de una mejor universidad y que, seguramente, no hubieran permitido este atraco a nuestra Alma Mater.